Esta actividad está planteada para los grados Úndecimo en la semana del 25 de Febrero al 4 de Marzo de 2009
LÓGICA Y ARGUMENTACIÓN
Las proposiciones categóricas
Busto de Aristóteles. Este filósofo fue quien primero sistematizó los conocimientos sobre lógica.
De acuerdo con la naturaleza de esta relación, las proposiciones categóricas son de cuatro tipos.
A => Universal afirmativa: Todos s es p.
E => Universal negativa: Ningún s es p.
0=> articular negativa: Algún s no es p.
Inferencias inmediatas
Se llama inferencia inmediata al razonamiento que tiene una sola premisa. Cuando las proposiciones categóricas tienen el mismo sujeto y predicado, pero difieren en el tipo de relación entre las categorías, y además se conoce el valor de verdad de una de las proposiciones, es posible hacer inferencias inmediatas. Por ejemplo, si sabemos que es cierta la proposición del tipo A, universal afirmativa, Todos los cuerpos ocupan un lugar en el espacio", podemos inferir que la proposición de tipo I, particular afirmativa, "algún cuerpo ocupa un lugar en el espacio", es verdadera. Y también estamos seguros de que son falsas las proposiciones:
Veremos ahora qué sucede cuando hay más de una premisa.
Silogismos categóricos
2. Los abogados son seres humanos.
3. Por lo tanto, los abogados no son malos por naturaleza.
En este tipo de razonamiento vemos que la conclusión es una proposición categórica en la cual se estableció una relación entre dos categorías, los abogados y los seres malos por naturaleza, gracias a la relación que cada una de estas categorías tiene con una tercera: los seres humanos. A esta categoría que permitió establecer la relación entre las otras dos la llamaremos término medio.
- Premisa mayor y premisa menor. A la premisa en la cual se encuentra el término predicado de la conclusión la llamamos premisa mayor. En este ejemplo el predicado de la conclusión es la categoría de los seres malos por naturaleza. Por lo tanto, la proposición 1 es la premisa mayor. La premisa en la cual se encuentra el sujeto de la conclusión se llama premisa menor. En el ejemplo, el sujeto de la proposición conclusión es la categoría de los abogados, por lo tanto, la premisa menor es la proposición número 2. Debes prestar atención porque el orden de aparición puede variar y la única manera de reordenarlo es identificando la conclusión y, con base en ella, poner a las premisas en su lugar. Esto puede ser muy útil para evaluar la validez del silogismo, como veremos más adelante.
- El modo y la figura. Podemos elaborar un silogismo categórico conociendo su modo y figura. El modo de un silogismo depende del tipo de proposición categórica que lo conforma. En nuestro ejemplo, la premisa mayor es del tipo E, universal negativa; la menor es del tipo A, universal afirmativa, pues al no determinar que se trata de algunos, es como si se estuviera afirmando que "Todos los abogados son seres humanos"; la proposición 3, que es la conclusión, es también del tipo E, pues aunque no se use la expresión "ningún", se está negando completamente la relación entre las dos categorías que forman la proposición. Por lo tanto, el modo de este silogismo se puede expresar de acuerdo con el tipo de proposición que lo conforma usando las vocales que identifican los tipos de proposición categórica: EAE.
La figura indica dónde se encuentra el término medio en las premisas del silogismo. En este caso, el término medio es la categoría de los seres humanos. En las premisas esta categoría se encuentra en el sujeto de la premisa mayor y en el predicado de la menor.
- Ningún ser humano es malo por naturaleza. (premisa mayor)
- Los abogados son seres humanos. (premisa menor)
- Por lo tanto, los abogados no son malos por naturaleza. (conclusión)
De acuerdo con la distribución del término medio en las premisas, hay cuatro figuras del silogismo categórico. En los esquemas, las letras s y p corresponden a los términos sujeto y predicado de la conclusión, respectivamente. La letra m corresponde al término medio.
Primera figura
1. m p
2. s m
3. s p
Segunda figura
1. p m
2. s m
3. s p
Tercera figura
1. m p
2. m s
3. s p
Cuarta figura
1. p m
2. m s
3. s p
Elaborar un silogismo con el modo y la figura
El modo y la figura nos sirven para elaborar y reconocer silogismos en los que, independientemente de las categorías que los conformen, podemos evaluar su validez, pues es de su estructura lógica que depende la validez. Es necesario decir que no todos los silogismos categóricos son válidos. Veamos un ejemplo de cómo elaborar un silogismo categórico con el modo y la figura que, al mismo tiempo, sea un ejemplo de un argumento inválido. Escojamos tres categorías cualesquiera: zapatos, medias y cuero, y hagamos un silogismo de modo E00 de la tercera figura. Por ejemplo:
Tercera figura
E Ninguna media es de cuero m p
0 Alguna media no es un zapato m s
0 Por lo tanto, algún zapato no es de cuero s p
Aunque la conclusión en la vida real sea cierta, es decir, aunque en la realidad haya algunos zapatos que no son de cuero, el silogismo no es válido porque del hecho de que no haya medias de cuero no se sigue nada acerca de los zapatos, y tampoco aporta ninguna información relevante al respecto la premisa menor. En las premisas no nos dan información para afirmar nada acerca de la categoría zapatos. Por lo tanto, la conclusión va mucho más allá de lo que se dice en las premisas y el silogismo es inválido.
La lógica aristotélica recibió un gran impulso
en la Edad Media, sobre todo en los monasterios.
Evaluar la validez de un silogismo categórico
Hay siete reglas por medio de las cuales se evalúa la validez de un silogismo categórico.
1. El silogismo tiene tres términos: mayor, medio y menor, cada uno de los cuales debe tener el mismo sentido en todo el razonamiento.
Un ejemplo sencillo. Los gatos maúllan; los aparatos que se usan para levantar carros son gatos; por lo tanto, los aparatos para levantar carros maúllan.
2. Lo que se halle distribuido en la conclusión debe estar distribuido en las premisas.
Como hemos visto, cada proposición categórica tiene dos términos: el sujeto y el predicado. La distribución es una propiedad de los términos de una proposición. Cuando en una proposición se habla de todos los miembros de una categoría, se dice que ese término está distribuido. Por ejemplo, en la frase, "Todos los hombres son mortales", está distribuido el término sujeto, porque se involucra en esta relación a todos los miembros del conjunto sujeto. Sin embargo, el término predicado no está distribuido porque sólo se habla de una fracción de los mortales, no de todos ellos.
En las proposiciones del tipo E, ambos términos están distribuidos; en las de tipo I, ningún término está distribuido; en las de tipo 0, el sujeto no está distribuido, pero sí lo está el predicado, pues se excluye a algunos miembros del término sujeto de todos los miembros del término predicado.
Veamos el ejemplo de una falacia en la que se viola esta regla.
· Los ingenieros son hombres.
· Todos los hombres son mortales.
· Por lo tanto, todos los mortales son ingenieros.
Se trata de un silogismo de modo AAA, pues las tres proposiciones son universales afirmativas, de la cuarta figura, pues el término medio está en el predicado de la mayor y en el sujeto de la menor. ¿Por qué no es válido? Porque el sujeto de la conclusión está distribuido allí, pero no está distribuido en la premisa menor. La conclusión dice mucho más de lo que dicen las premisas.
S. El término medio debe estar distribuido en, al menos, una de las premisas.
La relación que se establece entre las dos categorías que forman la conclusión depende de la relación que ambas categorías tienen con el término medio. Si el término medio no está distribuido no se puede garantizar esa relación.
· Los estudiantes de undécimo A van a ir a la universidad.
· Algunos estudiantes de undécimo B van a ir a la universidad.
· Por lo tanto, algunos estudiantes de undécimo B son estudiantes de undécimo A.
Tenemos un silogismo de modo A de la segunda figura. El término medio: aquellos que irán a la universidad, no está distribuido. Esta es la base de esta falacia.
Las siguientes reglas no necesitan explicación.
4. Si una premisa es negativa, la conclusión debe ser negativa.
5. Si una premisa so es particular, la conclusión debe ser particular.
6. De dos proposiciones negativas no se puede sacar conclusión alguna.
7. De dos proposiciones particulares no se puede sacar conclusión alguna.
COMPETENCIA ARGUMENTATIVA
Con esta actividad practicarás los conceptos estudiados en esta parte de la unidad: inferencias inmediatas y silogismos categóricos.
1. Inferencias inmediatas.- Recibes un mensaje del primer ser humano que pisa el planeta Grqws que dice: "En Grqws, algunas plantas no son verdes". La comunicación con el explorador se rompe para siempre. ¿Se puede inferir de allí que hay plantas verdes en Grqws? ¿Podemos afirmar que ninguna planta es verde en Grqws? ¿Estamos seguros de que todas las plantas son verdes en Grqws?
a) Elabora, con categorías de tu elección, un silogismo de cada uno de los siguientes modos y figuras.
AAA, primera figura